Las variaciones estacionales representan un reto significativo para la salud del pelo. El reconocido estilista Leonardo Rocco comparte técnicas efectivas para preservar la fuerza y el brillo capilar frente a los desafíos climáticos

Tanto en mujeres, como en hombres y niños, el cabello sufre los cambios de clima dependiendo de las estaciones del año. En verano, el cabello suele resecarse más por la exposición al calor y al sol, pero en invierno se puede poner quebradizo y débil por el frío intenso, la nieve y el calor de la calefacción en los interiores.

Así que, ante la presencia de lectores del hemisferio norte, que está en primavera-verano, y del hemisferio sur, que está en otoño-invierno, aquí consejos para todos.

Lo cierto es que como experto de la belleza capilar, te puedo decir que el mejor accesorio que cualquiera puede lucir es un cabello hermoso, cuidado, lujoso; la buena noticia es que todos pueden alcanzar ese objetivo si te dedicas y no descuidas la salud de tu pelo, y usas los productos adecuados y de alta calidad.

Sabemos que el sol, el viento y el agua salada o clorada pueden ser bastante duros con el pelo durante la temporada de calor, especialmente si lo tienes decolorado o pintado. En este caso, es importante cuidarlo especialmente.

El sol y el agua salada pueden deshidratar tu cabello rápidamente. Antes de ir a la playa o la piscina, moja tu cabello y aplica una mascarilla hidratante profunda. Yo te recomiendo que tenga base de aceites esenciales como aceite de coco, macadamia, argán, entre otros.

Importantísimo. Así como proteges tu piel del sol, tu cabello también necesita protección, de más está decir que uses sombrero. Utiliza productos capilares con protección UV. Existen sprays protectores de calor que sirven perfectamente para proteger el cabello del sol y cremas específicas que forman una barrera contra los rayos solares y previenen el daño.